Estación Parrita
El Cuerpo de Bomberos de Parrita abre oficialmente las puertas hacia la comunidad el viernes 03 de mayo del año 2002. Ese histórico día, una comitiva encabezada por el Presidente Ejecutivo del INS, realizó un desfile desde el terreno donado para la construcción de la estación hasta La Julieta de Parrita, en donde el Sr. Mario Gatica había prestado un galerón, el cual fue acondicionado para albergar provisionalmente a los bomberos de la comunidad.
La estación provisional comenzó sus labores con dos bomberos permanentes, con la unidad M-71, marca Ford y modelo 1979, contaba con sistema de espumógenos y sistema de bombeo Darley Champion, el cual tenía la capacidad de desplazar 1000 GPM.
El 18 de octubre del 2002, el primer comandante de Bomberos Voluntarios, Coronel Álvaro Escalante Montealegre, nombra en propiedad a la Compañía de Bomberos Voluntarios de Parrita, asignándole el Nº 61.
El 19 de febrero del 2005, llega a Parrita la casa donada y prefabricada para la construcción de la nueva Estación provisional, la cual se ubicaría en el terreno del Instituto, donado por el señor Carlos Monge, conocido por el pueblo de Parrita como “Caliche Monge”. En estos días se empieza, poco a poco, con la construcción del sueño gracias a la ayuda de la comunidad, bomberos permanentes y voluntarios y de otras personas.
Durante esos tiempos difíciles se tuvo que abandonar el local en el cual estuvo Bomberos por más de 3 años; con la ayuda del alcalde y del Consejo Municipal se asignó un local diagonal a la Municipalidad, el cual fue concedido hasta el día 31 de diciembre del 2005. Por no contar con galerón se debía dejar la unidad en un parqueo de la clínica vieja, la cual estaba deshabitada producto del terremoto del 20 de noviembre del 2004, que afectó fuertemente a la Zona de Parrita.
A través de los años se han presentado muchos inconvenientes y afectaciones para los Bomberos de Parrita, como estar de un lugar a otro por no contar con local estable. En el avance de la construcción existieron muchos problemas, falta de materiales, personal y las condiciones climatológicas retrasaron el trabajo del personal voluntario y permanente, quienes pusieron todo su empeño en la construcción, sacrificando tiempo libre, familia y hogar.
Desde la fundación de Bomberos han ocurrido dos desastres naturales, en los cuales la comunidad se ha beneficiado del servicio Bomberil. Como sucedió con el terremoto del 20 de noviembre del año 2004, a las 02:30 horas con magnitud de 6.2 grados en la escala Richter. Tanto comercio, carreteras, puentes, clínica y la planta procesadora de la localidad sufrieron daños, como los ciudadanos en sus viviendas.
Ha sido afectada por inundaciones, donde los Bomberos han dado lo mejor para auxiliar a personas atrapadas por el agua en sus viviendas y han formado parte del Comité Local de Emergencias en dicha localidad.
